sábado, 13 de febrero de 2016

Capítulo 4: Flores del color de la felicidad.


A penas Kyungsoo logró separarse de Kai tomó la mano del menor y lo condujo por el jardín a una banca algo escondida tras unos arbustos. Ambos se sentaron pero pronto Kai estuvo apoyado sobre el hombro de Kyungsoo mientras soltaba sonidos como de berrinche que sonaban muy tiernos al oído del mayor.

-Pensé que morirías- Murmuró Kai después de unos minutos de silencio.

-Yo también- Respondió Kyungsoo del mismo modo.

-¿Por qué lo hiciste?- Preguntó Kai tomando las manos de Kyungsoo y acariciándolas.

-Es difícil explicarlo. Cuando estas deprimido a veces se llega a un punto en el que la vida simplemente es una mierda que no quieres o no puedes seguir aguantando. Yo en algún momento me sentí tan solo que incluso estando con gente a mi alrededor seguía sintiéndome de esa forma.- Dijo Kyungsoo cerrando los ojos mientras disfrutaba la caricia que le daba el menor –Llegué a pensar y sigo pensando que realmente no le importo a nadie, que moriría solo, que nadie lloraría por mí y que era una carga para los demás… -Kyungsoo sonrió tristemente –De hecho, me sorprende que estés aquí-

Kai detuvo sus caricias y tomó las manos del mayor para que éste lo mirara -Kyungsoo, tú me importas demasiado. Jamás podría dejarte morir sin hacer algo por evitarlo- Dijo con una mirada honesta –Así que por favor, no vuelvas a cometer una locura como esa-

-¿Te das cuenta dónde estoy?- Preguntó Kyungsoo sonriendo -¡En un hospital psiquiátrico! ¿Lo entiendes? Estoy jodidamente loco-

Kai sonrió con ternura –No estás loco hyung, no más de lo normal-

-Gracias- Dijo Kyungsoo con sarcasmo. Kai rió y abrazó al mayor con un agarre muy apretado, como si temiera que Kyungsoo escapara de su lado. Kyungsoo rió suavemente correspondiendo al abrazo y aspirando el perfume que Kai ocupaba, cuyo olor simplemente le encantaba. Kai acomodó a Kyungsoo en su pecho mientras que éste abrazaba el tronco del menor suspirando y sin borrando la sonrisa de su rostro.

-Te extrañé demasiado- Murmuró Kai sin soltar su agarre sobre el mayor –De verdad, si hubiera tenido señal te habría llamado a todas horas y te habría molestado todo el día con mis mensajes-

-Te creo, sólo un poquito- Dijo Kyungsoo disfrutando estar en los brazos del otro. –Te agradezco que hayas venido de todo corazón, es bonito saber que le importas a alguien-

-En la cárcel y en el hospital se revelan los verdaderos amigos- Dijo Kai pensando que la realidad era otra, que a él no le interesaba Kyungsoo como amigo, a él le gustaba Kyungsoo como alguien para amar.

-Es bueno tenerte como amigo- Dijo Kyungsoo.

Entonces Kai se dio cuenta de algo: Kyungsoo estaba en un campo minado, un paso y podría morir. Había comprobado que el mayor estaba dispuesto a acabar con su vida de más de una manera y que su vida no le importaba en ni en lo más mínimo. Estaba a contra reloj. Si no le decía sus sentimientos pronto, quizás jamás podría volver a tener la oportunidad para decirle:

-No quiero ser tu amigo-

Kyungsoo se separó del menor inmediatamente con el ceño fruncido y mirándolo sin entender sus palabras -¿Qué dijiste?-

-No quiero ser tu amigo- Repitió Kai mirándolo a los ojos.

-¿Qué mierda? Dime que es una broma, no puedo perderte a ti también- Dijo Kyungsoo sintiendo que el mundo se caía y que caía en un agujero sin fin.

Kai tragó hondo, suspiró y tomó a Kyungsoo desde los hombros mirándolo fijamente. Era ahora o nunca, y Kai sabía que no habría segundas oportunidades para él o para Kyungsoo.

-Kyungsoo, yo desde que te vi me sentí atraído hacia ti. Creo que eres una persona maravillosa, muy fuerte, divertida y amable, con un hermoso corazón. Con el paso del tiempo esta atracción se transformó en otra cosa que no sabía lo que era hasta hace poco. –Kyungsoo escuchaba atentamente las palabras del menor, aún confundido por todo lo que pasaba. Entonces escuchó aquellas palabras que solo creyó que escucharía en sus mejores sueños –Yo te amo Kyungsoo-

-¿Qué? Pero… No puede ser. Tu… Yo… ¿Estás seguro? Porque… ¡Aish!- El mayor se rascó la cabeza frustrado y después se cruzó de brazos frente a la mirada confundida de Kai –Te odio-

-¿En serio?- Preguntó Kai preocupado.

-¡No!- Exclamó Kyungsoo inmediatamente -Eres perfecto, es decir, no lo eres pero a mi parecer… - Kyungsoo se calló al notar que estaba diciendo cosas que el otro no debía saber –Olvídalo- Y se levantó dispuesto a volver junto a Baekhyun para procesar todo aquello que había escuchado. Sin embargo Kai lo detuvo sosteniéndolo del brazo.

-Kyungsoo, yo te amo, y te protegeré incluso de ti mismo, te cuidaré siempre y estaré junto a ti cuando lo necesites y cuando no también. Yo quiero estar a tu lado eternamente y amarte honestamente… Así que por favor… Sé mío- Dijo con sinceridad y decisión en sus palabras.

-¿Quieres que sea tu novio?- Le preguntó Kyungsoo sin poder creer lo que el otro le pedía. Kai asintió -¿A pesar de que sea un depresivo de mierda y de que esté loco?-

Kai cambió su mirada a una más cariñosa y abrazó al mayor cálidamente –No eres un depresivo de mierda, solo estás pasando por una etapa difícil de tu vida. Y no eres el único loco, yo estoy loco por ti-

-¿Sabes que yo quizás mañana no esté con vida? ¿Qué un día cualquiera podrían darme ganas de morir nuevamente?- Kai asintió -¿Aún así quieres que sea tu novio?-

-Quiero estar contigo, sin importar lo que suceda. Quiero abrazarte, besarte, tomar tus manos y verte sonreír cuando esté a tu lado. Quiero que pases hermosos momentos a mi lado. –Kai se separó un poco de Kyungsoo, solo lo suficiente como para verse frente a frente -¿Quieres ser mi novio?-

Kyungsoo no podía creer lo que estaba oyendo. Él pensó que moriría solo y que nadie lo querría como él deseaba. Creyó firmemente que estaba solo contra el mundo, que la vida no valía la pena sintiéndose de esa manera. Sin embargo, ahora, frente a él, estaba el chico que le gustaba y le estaba preguntando si lo dejaba amarlo y si él lo amaría de vuelta.

Bendita vida.

-…Sí… Sí, mierda sí- Dijo Kyungsoo abrazándose fuertemente al menor quién sonrió feliz de haber sido correspondido.

Estuvieron abrazados por unos minutos siendo separados por el aviso de los técnicos de que las visitas tenían que marcharse. Se miraron sin querer despedirse y Kyungsoo hizo un puchero ya que no quería que ese momento se acabase, al igual que Kai, quería que durara para siempre.

Para cuando se dio cuenta sus labios estaban unidos a los de Kai. Cerró los ojos suspirando entre el beso y afirmándose de los hombros de Kai mientras que este mantenía sus manos en la cintura del mayor. Los labios de Kai eran simplemente maravillosos, exquisitos, sabrosos y adictivos. Pronto sintió la lengua del menor acariciando sus labios, pidiendo permiso para penetrar su boca.

Por supuesto, le permitió la entrada.

Y se estremeció cuando sintió esa cálida lengua acariciándolo de esa manera tan íntima, pasional. Si no fuera porque Kai lo sostenía habría caído al suelo, ya que sus piernas de pronto no podían sostener su peso y de pronto el mundo daba vueltas y vueltas.

-¡Kyungsoo, deja ir a tu noviecito!- Exclamó uno de los técnicos acabando el momento. Los ahora novios se separaron sonrojados pero sonriendo y Kai aprovechó de robarle un beso a Kyungsoo antes de tomarle la mano.

-¿Me vas a dejar a la puerta?- Le preguntó Kai a Kyungsoo. Éste asintió y se apoyó en el hombro de Kai mientras caminaban como par de enamorados que eran.  Fueron a paso lento ante la mirada de ternura de las cuidadoras y la de fastidio del técnico que los esperaba en la puerta.

-¿Vendrás mañana?- Preguntó Kyungsoo mirando a Kai.

-Por supuesto, vendré todos los días- Dijo Kai acariciando la mano de Kyungsoo. Al llegar a la puerta se miraron frente a frente sonriendo y Kai tomó con suavidad el rostro del mayor, dándole un beso en los labios y después uno en la frente. –Te amo, nos vamos mañana-

-Yo también te amo- Murmuró Kyungsoo muy sonrojado.

-Yo también los amo pero necesito que se separen ahora- Dijo el técnico de la puerta aburrido de esperar a que los novios se separaran. Kai y Kyungsoo se separaron avergonzados –Joven, retírese por favor-

-Sí, lo siento- Dijo Kai saliendo del recinto escuchando como la puerta se cerraba tras él. Suspiró antes de sonreír, comenzando a saltar y a celebrar por haber sido correspondido. Al llegar al auto de su madre ella le preguntó por Kyungsoo –Pues… Ahora es mi novio- Confesó avergonzado siendo felicitado por su madre.

Por otra parte, Kyungsoo estaba saltando, girando y gritando de felicidad, haciendo que Baekhyun, Luhan y Tao se acercaran a él pensando que estaba en una de sus crisis depresivas.

-¡Amo la vida, soy feliz!- Gritó Kyungsoo -¡Sáquenme de aquí, ya estoy curado!- Los demás lo veían entre divertidos y preocupados, ya que parecía que Kyungsoo se hubiera vuelto realmente loco. -¡Quiero vivir!-

-¿Llamo al doctor?- Preguntó Luhan a Baekhyun mirando a Kyungsoo. El chico negó.

-Dejémoslo disfrutar por un rato, si sigue así por mucho tiempo llamamos a los enfermeros- Dijo Baekhyun –Parece que simplemente le dieron una buena noticia o algo por el estilo-

-¡Baekhyun! ¡Luhan! ¡Tao!- Llamó Kyungsoo cuando se dio cuenta de la presencia de sus amigos – ¡Kai y yo somos novios!- Los tres corrieron a felicitar a Kyungsoo quién aceptó los abrazos de sus amigos efusivamente. –Estoy tan feliz, siento que podría morir de felicidad-

-Oye… ¿No tendrás bipolaridad en vez de depresión?- Dijo Tao en broma.

-Cállate Tao- Dijo Kyungsoo aún sonriendo –Nada de lo que digan o hagan me harán dejar de sonreír-




No hay comentarios:

Publicar un comentario